La secretaría de salud federal emitió hace unos días un aviso epidemiológico sobre rabia humana derivado del reporte de al menos 12 casos sospechosos de contagios registrados en diferentes partes de la nación

El documento difundido por la secretaria de salud relata que durante diciembre de 2022 se registró al Sistema Especial de Vigilancia Epidemiológica de Rabia Humana un caso confirmado de rabia humana transmitida por fauna urbana en Nayarit, derivado de la agresión a una persona por un gato sin antecedente de vacunación.

 Cabe mencionar, que los últimos dos casos de rabia humana por fauna urbana (Perro) en el país se registraron en el Estado de México en el 2005 (de acuerdo con la fecha de agresión).

En cuanto a rabia humana transmitida por fauna Selvática, en el mes de abril de 2022 se registró un caso confirmado transmitido por quiróptero en Jalisco.

 Adicionalmente en el mes de diciembre, en el estado de Oaxaca se notificaron dos casos confirmados (uno por laboratorio y otro por asociación epidemiológica) y un probable, seguido de la notificación de tres casos sospechosos más en el mes de enero de 2023, todos ellos por agresión por quiróptero. Adicionalmente en enero de 2023, se confirmó la presencia del virus rábico en un canino en el estado de Sonora, cuya caracterización antigénica identificada es la variante V.7 asociada a Zorro gris. Actualmente se está dando seguimiento a nueve personas que tuvieron contacto de riesgo con el canino.

El aviso epidemiológico de la secretaría de salud Federal instruye a todas las instituciones de salud sobre el protocolo a llevar a cabo al momento de estar en presencia de un probable caso de contagio para evitar que el virus pudiera convertirse en un problema mayor…

Se clasifica en rabia urbana, transmitida por perros y gatos, y rabia selvática, transmitida por quirópteros (murciélagos), coyotes, zorros, zorrillos, mapaches y otros mamíferos. Cabe mencionar que los animales de interés económico (vacas, cabras, ovinos, cerdos, caballos, etc.) son susceptibles a la rabia y pueden transmitirla por contacto con el ser humano

la mayoría de los casos es de uno a tres meses, aunque se han documentado periodos mayores de un año. En México, se ha documentado la variación del periodo de 6 a 249 días, con un promedio de 69, cuya variabilidad se debe a la especie transmisora y el sitio de inoculación del virus.

El primer síntoma comúnmente reportado es dolor neuropático en el sitio de inoculación. La enfermedad puede manifestarse en forma furiosa o paralítica. La fase neurológica cursa con lapsos de lucidez y delirio, respiración rápida, parálisis de nervios craneales, músculo cardiaco y músculos respiratorios. Cuando el virus alcanza el sistema nervioso central es irreversible, causando la muerte dentro de los 7 a 10 días posteriores a la presentación del primer síntoma. En esta fase la enfermedad evoluciona en horas manifestándose hiperactividad, desorientación, delirio, alucinaciones, convulsiones y rigidez de nuca, que progresan hasta la parálisis irregular de los músculos respiratorios, lo que conduce al estado de coma.

De acuerdo con Organización Mundial de la Salud (OMS) el virus se encuentra distribuido en todos los continentes, con excepción de la Antártida, con una letalidad de casi el 100 %. Es responsable de más de 60,000 defunciones anuales a nivel mundial, concentrándose más del 95 % en Asia y África. El perro es responsable de hasta el 99 % de los casos de rabia humana a nivel mundial. En la región de las Américas, a partir de la puesta en marcha del Programa de Eliminación de la Rabia humana transmitida por perros en 1983, se ha reducido la incidencia, pasando de 355 casos notificados en ese año a dos casos transmitidos por perro en 2020. La rabia transmitida por mamíferos selváticos ha tomado mayor importancia en los últimos años, siendo el transmisor más frecuente el murciélago hematófago (Desmodus rotundus). En los últimos cinco años se han registrado 65 casos de rabia humana en la Región de las Américas, de los cuales el 66 %, han sido transmitidos por mamíferos selváticos. En el 2019, México se convirtió en el primer país en recibir la validación por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) por haber eliminado la rabia transmitida por el perro como problema de salud pública.