Con una jeringa le inyectaron anestesia en el nervio óptico, luego la empapelaron el rostro y así comenzó la operación de doña Socorrito.
La preocupación de don Lalo al saber que en cualquier momento él puede morir debido a que le detectaron un coagulo en el cerebro, lo mantiene en constante temor al pensar que su viejita puede quedarse sola y más aún, porque ella no puede valerse por sí misma, ya que a la mujer le falla la vista y el oído.
Que difícil debe ser vivir entre sombras borrosas, sin distinguir nada, ni a nadie y peor aún, cuando también te falla el oído.
La historia de esta pareja de viejitos ha conmovido a la ciudadanía, y gracias a las aportaciones económicas de los ciudadanos, el sueño que la mujer recobre la vista y se pueda valer por sí misma, es hoy una realidad.
Fue en el municipio de Celaya, donde se efectuó la operación.
Como todo un gran guardián, don Lalo acompañó al amor de su vida durante todo el día, incluso al sitio llegaron algunas personas a brindarles su apoyo y a pedirle a Dios que todo saliera bien.
Fue alrededor de una hora lo que duró la cirugía, finalmente el medico salió y nos dio la agradable noticia: Doña Socorrito recuperará en gran proporción la vista de su ojito derecho.
No cabe duda que la voluntad entre los seres humanos, puede generar cambios, cumplir sueños, mover montañas y lograr milagros….
Gracias a todos los que apoyaron para esta noble causa.