Recientemente en México vivimos una crisis por producción y legal de fentanilo un poderoso opioide que funciona como sedante y analgésico, actualmente los cárteles de México incluyen el fentanilo en muchas drogas y adicionalmente sintetizan sus propios lotes de este analgésico dejando a la población en riesgo de sufrir una sobredosis derivada del consumo excesivo de esta sustancia.
Actualmente existe un fármaco para tratar la sobredosis por opioides hablamos de la naloxona, es un antagonista directo y poderoso que compite contra la morfina, el fentanilo o cualquier tipo de opioide existente para sacarlo de sus receptores y así poder tratar la intoxicación que provocó la sobredosis sin embargo la naloxona es el único y ha tenido resultados poco eficientes para la sobredosis de fentanilo de ahí nace la necesidad por buscar nuevos antídotos.
¿Pues qué creen?
Investigadores de la universidad de indiana Bloomington han propuesto que un compuesto de la marihuana otra de las drogas traficadas por muchos cárteles en México y Estados Unidos, podría ser un compuesto efectivo para tratar la intoxicación por fentanilo
Los investigadores presentarán sus resultados en la reunión de primavera de la American Chemical Society (ACS). ACS Spring 2023 es una reunión híbrida que se lleva a cabo virtualmente y en persona del 26 al 30 de marzo.
Pero no toda la marihuana en especial un compuesto llamado cannabidiol (CBD) por sus siglas, Investigaciones anteriores que sugerían que el CBD puede interferir con la unión de opioides inspiraron el esfuerzo actual. En una investigación publicada en 2006, un grupo con sede en Alemania concluyó que el CBD obstaculizaba indirectamente la unión de opioides al alterar la forma del receptor. Cuando se usó con naloxona, descubrieron que el CBD aceleraba el efecto del medicamento, lo que obligaba a los receptores a liberar opioides.
Para aumentar estos efectos, Gudorf alteró la estructura del CBD para generar derivados. Taryn Bosquez-Berger, estudiante de posgrado en el grupo de Straiker, probó estos nuevos compuestos en células con una sustancia llamada DAMGO, un opioide que se usa solo en estudios de laboratorio. Para medir su éxito, supervisó una señal molecular que disminuye cuando se une este tipo de fármaco. Armada con los comentarios de estos experimentos, Gudorf perfeccionó las estructuras que generó
Varios derivados podrían reducir la unión de fentanilo incluso en lo que Bosquez-Berger describió como concentraciones «increíblemente bajas», mientras que también superaban el rendimiento de bloqueo de opioides de la naloxona. Dos de estos también mostraron un efecto sinérgico cuando se combinaron con el antídoto.
Esto significa que ahora tenemos una alternativa para poder crear un antídoto en compañía del ya antes diseñado y uno de los componentes más destacados de la marihuana.
Estamos ansiosos por saber qué dirá la comunidad científica, pero sobre todo cuál será el debate ético y moral que sigue después ya que como sabemos al menos en México los productos con cannabidiol no están correctamente legislados y las concentraciones que incluyen ciertas pomadas o formas farmacéuticas son menores al 0.1%, lo cual nos deja con la duda si será suficiente para poder alcanzar el efecto terapéutico.
Este es un nuevo ejemplo de cómo la ciencia se queda coartada ante las legislaciones ante la ética y ante el desarrollo humano pero qué bueno que sea así imagínense los casos donde no pudiéramos detener el desarrollo científico y qué cosas malas también podrían pasar-.
esperemos a que se lleguen estos días de marzo para conocer los resultados de la perspectiva científica y ojalá algún día podamos contar con un antídoto para evitar miles de muertes por intoxicación por opioides y darle un uso a la tan satanizada marihuana.